Moda Europea y globalización de mercados.

Erase una vez, un estado de bienestar capitalista, señoras y señores bien atabiados de materias nobles en sus vestimentas, proporcionaban un sólido empleo a modistos, diseñadores y fabricantes textiles de profunda y arraigada tradición en pluralidad, calidad y vanguardia siendo líderes en el mundo por su saber hacer.
Hasta que un buen día, un señor fabricante de batas de boatiné, tuvo una brillante idea capitalista para enriquecerse: fabricar cantidades industriales desorbitadas de modelos, en el lejano oriente para conseguir precios desorbitadamente baratos y con ello monopolizar el mercado en su sector. Tampoco fue un obstáculo lanzar colecciones basadas en copias de los mejores creadores europeos para conseguir su objetivo... protegido con leyes hechas para ser infringidas. Las leyes para ser transgredidas son la base de nuestra turbia economía capitalista.

Tan buena fue su idea capitalista que lo consiguió, y también que otros tantos empresarios siguieran su modelo de negocio en su sector para competir-le. Pero era tan espectacularmente lucrativo que otros sectores le siguieron los pasos, alimentación, decoración, automoción... etc.

Unos años mas tarde, Europa empobreció y todos los mercados europeos estaban saturados de réplicas europeas, fabricadas en oriente con materias de baja calidad y compuestos derivados con fibras sintéticas que dañaban el medio ambiente y que ya nadie quería o podían consumir.
Oriente tanto enriqueció, y Europa tanto empobreció que principalmente solo orientales podían permitirse consumir los modelos exclusivos con materias nobles propias de las vestimentas de los señores y señoras europeas del antiguo estado capitalista de bienestar.

Hoy la sociedad europea, ha comprendido el valor del producto de marcas y modelos exclusivos de alta calidad y hacen largas colas para perderse en ferias y mercadillos vintage buscando esas materias que tanto añoran por falta de oferta y equidad en precio y calidad.

El mundo esta cambiando velózmente, y ya son unos cuántos los que han comprendido por dónde retomar la situación, Internet nos muestra el camino, apoya el sector de lujo y calidad comprando online en ventas privadas productos genuinamente europeos, con procesos de producción controlados y sostenibles.


No esperes... busca seda fina, voile de algodón, lino fresco o la lana caliente... que tanto añoras y ... sigueme!


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