Poker de Damas y nueva era de feminidad.
La feminidad es un estado del ser, no solo puede ser aparente, pues esta liado al ser... yo diría, encarnar dejar fluir las fuerzas femeninas que están dentro de si. La dulzura, la sensualidad, la gracia, la magia, la danza, el coraje, el optimismo, la melancolía, la tristeza, la necesidad de hablar de cuestiones emocionales, la espiritualidad, estar conectada con las personas con empatía, dar sentido a la vida, seducción y juegos de amor... son todos los aspectos que han definido la feminidad durante siglos y que han pasado por distintos procesos sociológicos, anulándola o realzándola según los movimientos y evolución culturales.
Feminidad y sensibilidad se parecen, dulzura... pero hay que precisar también que finalmente nada impide tener mano de hierro con guante de terciopelo. Muy cierto es que tan femenino puede ser saber hacerse respetar. Llegar a la madurez y saber gestionar todos estos valores no es un trabajo fácil, pues no debemos confundir feminidad con fragilidad o debilidad, puesto que puede estar relacionado en algunos casos con la inferioridad respecto al género masculino. A ese malentendido habria que añadir que simplemente es tan sencillo como asumir que somos compatibles con formas de acción diversas y complementarias.
Tal vez por ello haya sido el motivo de estar anulada en periodos de defensa y desarrollo de la actividad profesional de la mujer. Aun así la naturaleza femenina ha estado siempre en la piel de mujeres bien dotadas de estrógenos, fueran o no emprendedoras de éxito.
Ese es el estado del ser etérnamente identificado al género femenino como esencia, y jamás en apariencia, pues es bastante común en nuestra sociedad avanzada y erróneamente valoradas como mujeres bandera, las nacidas mujer sin muchos aspectos de feminidad propiamente que las carácterice, eso ha sido un factor detonante junto al desafío de ser igualmente productivas laboralmente y en los mismos campos de acción que el género masculino; para la evolución de las relaciones de pareja de nuestra época.
La feminidad está finalmente de moda... sólo algunas no se han enterado aún, donde está el terreno de juego.
Los factores que sin duda motivan la feminidad, pasan por los detalles, las formas el equilibrio y la paciencia. Todo mezclado en un buen cóctel de materias y colores suaves sobre siluetas de muñecas reinventadas en esta, nuestra nueva era futurista, recuperando y transformando tendencias del siglo XVIII, recordando el estado en esencia y feminidad de nuestras ancestros, y que sin duda, harán las delicias de cualquier género masculino.♡
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